domingo, 11 de diciembre de 2016

EL INSÓLITO CASO DEL "INFORMADOR PÚBLICO"



Estimados amigos: El que escribe, viene leyendo desde hace años “El Informativo Público”, como muchos de ustedes” y ha tenido la oportunidad de ver publicados sus artículos, en un medio de las redes sociales que nos permitía exponer las opiniones que eran negadas o ignoradas en los prestigiosos periódicos del país.
Últimamente he observado detalles, que no vienen al caso señalar, que pusieron en duda la imparcialidad y honestidad de este informativo. El espacio cedido a cierto escritor de raigambre peronista al que lo hemos leído dos y hasta tres veces en diarias publicaciones, sin nada que lo justificara, y menos la calidad de sus escritos,  resultaba extraño y llamativo.
Dos o tres de mis trabajos enviados para su publicación, que comunmente fueron tenidos en cuenta, fueron ignorados, y llamó mi atención el hecho de que se tratara del caso de Milagro Sala, donde exponía antecedentes que demostraban la intervención de organizaciones internacionales de derechos humanos que hace muchos años vienen desarrollando planes de acción conjunta de neto corte izquierdista. De todos modos, respetando el derecho del editor en cuanto a la elección de los temas a publicar, no le presté mucha importancia. Sin embargo, advertí que se daba prioridad a los temas políticos contrarios al gobierno, lo que tampoco me sorprendió porque estaba de modo la crítica al equipo gubernamental, al comienzo en forma disimulada y posteriormente ya más directa con frases agresivas y especulaciones de carácter científico y jurídicas como las empleadas por el doctor Nelson Castro.
Pero hoy, 11 de diciembre de2016, mi experiencia y mi inquisidora mirada me han permitido llegar a comprobar que algo se esconde detrás de las páginas del “Informador Público”, periódico digital de cierto renombre. Si ustedes se imponen la tarea de leer su edición de la fecha, se encontrarán con que un porcentaje cercano al 95% lo conforma una crítica inusual al presidente Macri, su gabinete, sus gestiones, además de un pronóstico tan lapidario de la economía, que pone en serias dudas la terminación del mandato.
Por último, el dato más relevante consiste en que ocho (8) de los artículos publicados llevan la firma de los propietarios y titulares del magazine. ¿Qué interés mercenario puede haberlos decidido a rechazar escritos afines al gobierno o contrarios al izquierdismo y salir con sus propias opiniones a tambor batiente?

Me resisto a conclusiones apresuradas, pero dejo esta inquietud, bien razonable, a vuestra consideración, con el deseo de recibir vuestras impresiones de gran importancia para mí. Un saludo cordial,
por Carlos Tórtora • 11/12/2016
por Guillermo Cherashny • 11/12/2016
por Antonio Rossi • 11/12/2016
por Guillermo Cherashny • 10/12/2016
por Informador Público • 10/12/2016
por Guillermo Cherashny • 09/12/2016
por Jorge Raventos • 09/12/2016
por Hernán Andrés Kruse • 09/12/2016
por Guillermo Cherashny • 08/12/2016
por Hernán Andrés Kruse • 08/12/2016
por José M. García Rozado • 08/12/2016
por Guillermo Cherashny • 07/12/2016

por Carlos Tórtora • 07/12/2016