miércoles, 17 de febrero de 2016

NELSON CASTRO EL JURISTA ENFADADO

Hoy a la 18 hs se colmó mi capacidad de asombro cuando vi y escuché a Nelson Castro en TN ofreciendo una cátedra de Derecho Penal. Sus argumentos se dedicaron a desautorizar a jueces y fiscales de la provincia de Jujuy, al rebatir sus fallos afirmando que la detención de la activista Milagro Sala era una tremenda injusticia y que las razones técnicas, dijo, para mantenerla presa eran insostenibles, todo eso acompañado de un visaje de franco repudio Y como una demostración de sus improvisados argumentos, terminó justificando los cortes de calles y rutas provocados por las organizaciones izquierdistas, comunistas y kirchneristas que pedían su liberación.
En sus fuertes y reiteradas críticas , un tanto exageradas, se erigió en defensor de los derechos humanos, afirmando que jamás una persona debe permanecer detenida durante su proceso.
Los que algo sabemos de derecho debemos advertirle que no es ese un principio a generalizar para todos los procesos penales, que cada uno tiene sus propias características y que depende de muchos factores. Habría que preguntarle si alguna vez ejerció en forma ten vehemente la defensa de los casi dos mil presos políticos detenidos en cárceles nauseabundas con procesos de largos años de duración y con el agravante de que en su mayoría son ancianos a los que ni el derecho de libertad domiciliaria les es reconocido.
Es el tercer artículo que escribo en mi blogspot con respecto a este periodista que en las últimas semanas ha realizado un giro no muy elegante en muchos aspectos de la política, coincidiendo con la asunción al poder del nuevo gobierno de Mauricio Macri. En el primero lo hallé muy crítico de la inflación que poco menos se la atribuía al nuevo gobierno y en el segundo confundió una disposición bancaria con una resolución gubernamental, atribuyendo al gobierno ligereza en el dictado de la misma.
Ya que es médico, continuaremos auscultando sus reacciones y sus raptos de variaciones políticas que han sido realmente llamativas, dado el sano criterio que debemos reconocerle en presentaciones anteriores.